Otra vez
volví a creer, aunque fuera por un día,
cuando aquel ángel
cicatrizó todas mis heridas
y me cubrió con sus alas
hasta que
cesó el ruido de las balas.
¿Qué es lo que está pasando?
¿Qué es lo que está pasando?
Está pasando una vez más.
Pero fue la última parte,
la parte más difícil.
Esta vez fue mi propio miedo,
fue mi propio miedo que casi me deja ciego.
Ahora entiendo el sentido de las cosas,
el equilibrio de la balanza,
el polvo de las estrellas,
las rocas que ahora son arena.
Ahora entiendo que
cada espina
y que
cada pequeño arañazo,
cada cuchillo por la espalda,
fue tan sólo un pequeño trámite,
tan sólo una excusa idiota,
fue tan sólo un pequeño trámite,
tan sólo una excusa idiota,
Tan sólo un pequeño trámite,
tan sólo una excusa idiota.
Hace tiempo que yo ya no sonreía tanto...