sábado, 3 de marzo de 2007

Junto al anochecer

Un sábado distinto.

De esos que recuerdo con cariño, sonriendo al evocarlo.
Porque mientras decenas de grupos subían y bajaban la cuesta del parque para hacer botellón, ahí estábamos nosotros, asomados a un mirador y contemplando como la noche se iba cerrando poco a poco encima de nosotros.
[Foto del paisaje que teníamos delante. Preciosa]

Lamentando que el paisaje estuviera salpicado de grúas y edificios dispares, nos quedamos por un momento en silencio, absorbidos por la imponente y relajante belleza de la poca naturaleza que teníamos a nuestro alcance.
Unos cuantos pinos, y carretera.
Pero ese cielo...
Con ese cielo se podía disculpar todo.

Soy una sensiblona, lo sé. Pero me es irresistible.

Así que, aprovechando la situación, saqué un viejo céntimo de mi bolso y lo fui posando en los labios de todo aquel que quisiera.
"Pide un deseo..."
Y lo han pedido.

Después, he tirado el céntimo todo lo lejos que he podido. Una monedita sin valor para algunos, pero con mucho valor para mí.
Cayó ladera abajo conteniendo los deseos [menos el mío, que me he abstenido de pedir nada], encerrando un secreto que solamente él sabrá.
Espero que no se cumpla lo que ha dicho Álex [mientras ambos pensábamos en pensamientos] y no sea comido por un zorro.



Así que cuando la magia del momento se había consumido, tuvimos que abandonar ese emblemático mirador, al que, seguramente, cada vez que nos acerquecemos rememoraremos ese momento.
Y ese cielo. Esa compañía.



Gracias por ese sábado distinto. La mejor terapia que pudiera necesitar.



***




Gracias, feo. Nuestro vicio.
Por ese encuentro furtivo en el paso de cebra.
¿En serio es quien creo que es?

...Cuando menos te lo esperas.
Espero que se repita, no quiero estar otros seis meses sin verte.





Me enfrento al cruel y despiadado domingo, ¿por qué me gustarán tan poco?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No podría haber resumido mejor esa sensación k se produce al ver ese paisaje,precioso. Y espero tambien k el supuesto zorro no engulla el centimo con los deseos en su interior. Seguiremos pensando en pensamientos..... Un saludo elena.

Soñadora Empedernida dijo...

Gracias, Álex, por inaugurar el blog ^^

Ya sabes, pensemos en pensamientos.



:*