lunes, 24 de abril de 2017

El amor.

Si tuvieras que elegir, ¿podrías decir cuál ha sido la historia de amor que más te ha marcado? ¿Tienes una que te haya removido de tal manera que sabes que va a ser esa siempre?

Las palabras de S, siempre tan sabio, me hicieron reflexionar sobre lo extraños que pueden llegar a ser los recuerdos. Vuelvo muchísimo sobre ellos pero es que, en definitiva, mi materia y mi forma responden en parte a esas remembranzas ocultas, agazapadas en los recovecos de mi memoria. Pero sí, vuelvo a ellos y hoy es para decir que son extraños. Caprichosos. ¿Somos nosotros los que tenemos el poder de activarlos o hay alguna fuerza que no terminamos de lograr entender que los revuelve y los pone, otra vez, delante de nuestros ojos?

Yo creo que, si hemos tenido que vivir una gran historia de amor, ya la hemos vivido. Que ya hemos experimentado esa gran historia, dada nuestra edad y nuestra experiencia. Creo que al que no le ha ocurrido algo así todavía es porque ya no le va a ocurrir.

Son extraños, primero, porque pueden actuar de barrera o de puerta. No a la vez. Si acaso, primero una, y luego la otra. Nos conforman y nos hacen saber qué es lo que nos gusta, lo que queremos para nuestra vida, y, de una manera similar pero contraria, también provocan que en ocasiones salten todas nuestras alarmas. Es cuando no queremos que algo se repita. Entonces también actúan, levantando una tapia kilométrica ante estímulos externos.

¿Crees que hay una historia que nos marca de tal manera que, todo lo que vayamos a vivir después, va a ser a través de ellas? ¿Crees que a veces amar a alguien de una manera tan única nos condena a sobrevivir a base de réplicas menos intensas de esos sentimientos?

Soy una cabezona, y por eso a veces me rebelo ante las cosas que pienso y que no quiero pensar. Puedo pasar unos días concentrada en vaciar mi mente de todas esas imágenes, esos recuerdos, pero al cabo del tiempo me reprendo y me explico a mí misma, una vez más, que hay cosas que permanecen, y tengo que aprender a convivir con ellas en calma en lugar de gastar energías rechazándolas. Porque forman parte de mí, y se van a quedar conmigo, pues así lo decidieron mis pasos.

Yo sé que el día que me muera pensaré en ellos. Sé que ellos vendrán a mi cabeza por muchos años que hayan pasado.




5 comentarios:

Jorge dijo...

A veces me da por pensar y una de las cosas que se me ocurren es: si no hiciste (o te sucedió o viviste) cierta experiencia en su momento, ya no vas a experimentarla; que todo tiene su tiempo.
Puedo decir que sí, que viví esa historia de amor, en el tiempo adecuado, y que me marcó para el resto, no solo en otras historias amorosas o similares, me marcó para mucho más.
Tal vez sí, estamos predestinados a "esa historia de amor" (tampoco he vivido tantas) que, una vez pasada, ya no se repite o se reinterpreta. Lo que sí aseguro es que no estuve a la altura.

Es bonito ver que alguien es capaz de escribir de una manera tan constante y sobre cosas buenas.

Soñadora Empedernida dijo...

¿Tú crees? ¿Crees que una vez vivida la que creemos que es La Historia de Amor ya no hay ninguna que la puede superar? No lo sé, me lo pregunto mucho, como puedes leer...

Hay una escena en la película "Her" (no sé si la has visto) en la que el protagonista, agotado, le habla a su amiga sobre una cita fallida y le dice:
"Quizás esta vez hubiese sentido lleno ese agujero en mi corazón. Probablemente no... ¿Sabes? A veces siento que ya he sentido todo lo que voy a sentir jamás. Y que, de aquí en adelante, ya no voy a sentir nada nuevo. Sólo versiones más pequeñas de lo que ya he sentido."

Esa frase me marcó porque, al escucharla, tuve miedo de que eso también me fuera a ocurrir a mí. Sin embargo, después de ello acabé enamorándome con una intensidad diferente a la primera vez, lo mismo que el protagonista, que acaba sintiendo, pero de manera diferente... Yo no sé si estuve a la altura o no (intenté que sí), pero lo que sí sé es que no me arrepiento de haber sentido.

Millones de gracias por tu comentario. Tus palabras son una alegría inesperada que, ahora mismo, me viene más que bien :)

PD: ¿Hay algún lugar donde pueda leerte yo a ti?

Jorge dijo...

No sé si fue "la historia de amor", eso no lo podemos saber, pero así la considero porque no he repetido nada con tanta intensidad, ni para bien ni para mal. Creo que desarrollé demasiados prejuicios a partir de ella; ¿superarla?, no lo puedo saber, pero no se puede uno cerrar a nada.

No he visto "Her" pero me la pongo en lista; la frase es muy buena y me identifico en parte con ella. También me volví a enamorar pero de diferente manera y que me sirvió para pensar y creer y medio afirmar que la otra sí fue "la historia de amor" que no sé si se volverá a repetir, pues en ésa segunda deposite muchas de las cosas que me marcaron en la primera, inconscientemente, claro, pero que con el tiempo he visto y en su momento, cuando la estaba viviendo, esa segunda historia de amor, o enamoramiento, no veía.

Hace unos meses que te leo pero no había pensado antes comentar nada, tímido que soy.

Estoy preparando un blog, a ver qué sale, porque voy lento porque hago muchas pruebas. A ver si publico algo; hace mucho que dejé de escribir..., todo será retomarlo y decidirse en serio. La dirección sale en la ficha de Gravatar que he puesto al dejar el comentario; lo pongo aquí también: jorgegalopante.wordpress.com (de momento no hay nada, lo tengo en privado).

Jorge dijo...

Perdona, lo he cambiado (es que estoy de pruebas y no me decido):

https://anonimogalopante.wordpress.com/

Soñadora Empedernida dijo...

Muchas gracias por el enlace :) Lo estuve mirando el otro día por encima, pero ahora me meto con más calma. Y no puedo más que animarte a que lo retomes y escribas. Me gusta pensar que escribir nunca es una mala idea.

Y a raíz de lo que dices, por desgracia todas las historias de amor fallidas nos dejan poso, y se van acumulando... Pero como ya te dije me da un poco de pánico quedarme en el pensamiento de que ya está, de que ya he sentido lo máximo que podía sentir; prefiero pensar que quedan cosas todavía que vengan a sorprenderme. También es que si no pensara así... menudo bajón.

Lo que sí me sorprende es que me digas que llevabas meses leyéndome. Me alegro mucho de que te decidieras a comentar :) ¡Pero mucho!