domingo, 3 de agosto de 2008

-Cállate la boca.
-Porque lo digas tú.
-Sí, precisamente porque lo digo yo. Y porque soy tu madre.
-Eres mi madre y deja de contar. No eres ni mi dueña, ni la dueña de mi vida.


Algo se rompe y me temo que lo siento irreparable.

2 comentarios:

Nalen dijo...

¿Quién no ha tenido esa conversación alguna vez?
=)

Anónimo dijo...

Como dice 'Nalen', ¿quién no la ha tenido?...


Me ha gustado mucho el texto anterior. Bueno, realmente, es que me encantan todos, ya lo deberías saber ^^
Es que hacen que me sumerja de lleno en ellos *-*


Por cierto, gracias por aquello de que te animé a actualizar cuando aún estabas 'embotada' por el viaje ;)

Besazos pequeñuela!!