viernes, 29 de febrero de 2008

Cuando nos dijeron que lo primero que pasaría cuando llegáramos al aeropuerto de Bérgamo sería el hecho de que los perros italianos nos olfatearían de arriba a abajo en busca de sustancias estupefacientes, las reacciones fueron muy dispares. Los hubo que se rieron y los hubo que dijeron en voz baja que a ellos les daba verdadero pavor los perros.

Yo, sin poder evitarlo, me vi preguntándome cómo le sentaría a los perros su olor. Ese olor que ya forma parte del mío, que es el mismo, que no es igual. Pues yo el mío lo conozco de sobra. El suyo me sabe más dulce.



Quería dejar constancia del día de hoy. De la marca del bisiesto. Me hacía especial ilusión. Cosas que pasan...

7 comentarios:

Rubbens dijo...

Aunque sea bisiesto "rieron" sigue siendo llana.

:)

Ni

Yuki Ashura dijo...

Hasta dentro de no pocho ;}

Anónimo dijo...

Me hace gracia el hecho de que el olor de una persona no tenga su origen en si mismo, si no en su hogar. Cada vez que entro a una casa que no sea la mia me inunda un olor caracteristico, igual que el de la persona pero potenciado.

Me encanta esa sensacion de conocer a una persona por eso, es una forma de acercamiento que casi nadie tiene en cuenta.

saudade dijo...

Dejemos esa constancia...

Yonseca dijo...

Aaaah, a mí se me olvidó >.<

Quería dejar la marca también...
Pero también es cierto que no tengo muchas ganas de postear últimamente...

En fin... ya volverán las ganas...

Un saludo, Soñadora

Empty Zone dijo...

Soñadora empedernida que busca a bombero empedernido para que le arregle averías



=)
me verás pululando más por aquí !

Anónimo dijo...

Nacer en bisiesto debe de tener algo doblemente especial.

Puede que dentro de cuatro años me ponga el traje de "nacida el 29 de Febrero: Lady "bi"-siesto, y salga a la calle...(sólo para ver qué pasa).

Un saludo.